4/4/10
color de fresa
¡Qué solaco! ¡Quina cosa! Así da gusto salir del palomar, bajar los rellanos y plantarse en la calle, que hasta parece más ancha, más limpia, más hermosota, ¿a qué sí?
Me he ido a la Mercadona para sentir el aroma de los fresones que hay en la sección de frutería y en las cajas. Hasta me han dejado catarlas. Qué guapas son las dependientas -por fuera y por dentro, pero, sobre todo, por dentro!
Con el aroma a fresón el mundo me parece de color de rosa, como en la canción de la gorriona de París.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario